martes, 9 de noviembre de 2010

The Office

Me volves loca
estoy como fernet sin coca
Desparramada en la calle
como un auto sin garaje.

Pero esta vez vos
no te la llevas de arriba.
Te las voy a cobrar
todas juntas mas el IVA

Esto escribí con mi amiga Mariana, aburridísimas en la oficina. Poesía bizarra made in Puerto Madero. Pasen y sírvanse!

sábado, 18 de septiembre de 2010

Y si salimos...

Me despierto, desayuno, trabajo, tomo café, trabajo, gimnasio, subte, colectivo, más café, leo ceno y a dormir.
Hace un mes empecé a entrenar e ir cuatro veces por semana al gimnasio. Voy a correr un triatlón. Nunca fui una chica deportista pero necesito hacer algo que creía imposible. Extender mis propios límites.
Pero esta semana se acabó la fiesta, la música, la risa, el faso, el yogur con cereal. No da para más, hoy salgo a bailar salsa. Pienso quedarme hasta las seis de la mañana moviendo las caderas y tomando fernet.
Gente aviso: quiero mucho manoseo y manos en el orto. Me cansé de sufrir.

Todo


Quiero escribir pero me sale vómito.


Nunca me gustaron las muñecas, ni jugar  con otras nenas en el recreo del colegio. Siempre fui varonera. Andaba con nenes, con las rodillas llenas de moretones y los pantalones rotos. Me gusta el futbol, ir a la cancha a ver al globo y tengo una profunda afinidad con lo que se llaman “ciencias duras”. De chica jugaba con legos  y les arrancaba los pelos rubios a las barbies que me regalaba abuela Elena. Las mutilaba en una especie de rito sectario, vaticinando mi futura aversión a las vedetongas de Tinelli 100 % plástico, y a los tarados oficinistas que trabajan doce horas por día para comprarse una así. 
Pero a pesar de esto mi colores preferidos son el violeta, el fucsia y el rosa. Me gustan  las uñas pintadas y el pelo largísimo. Me conmueve la femineidad en cualquiera de sus expresiones.

Ya no me molesto por saber quien soy. Estoy cada día mas convencida que en mi habitan much@s mas.