lunes, 19 de diciembre de 2011

Perro y Gato

Este post lo escribí para un taller de escritura que hice en el verano del 2007


Yo soy como una gata,
arisca, mimosa, misteriosa.
Insistente te invado, te trepo, te envuelvo,
ronroneo, me estiro maúllo.
Busco mimos. 
Los encuentro.


Vos sos como un perro,
simple alegre exaltado.
Necesitas que te miren,
te acaricien, te aplaudan.
Das vueltas por la casa,
olfateas los muebles.
Vivís de la comida,
los diarios y la acción.
Gata y perro dormían juntos
enredados, confundidos, abrazados.


Pero la naturaleza siempre gana.
Hoy me levante temprano a tirar las rosas secas
que algún día me regalaste.
Las metí bien hondo en el tacho de basura,
cerré la tapa y la pise.
Saque las sábanas,
las fundas de la almohada,
el sweater a rallas blanco y negro que tanto te gusta.
Metí todo en el lavarropa.
Llevátelo de una vez.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Ya llega el verano y yo con un final para dar. Rendir examen significa: yerba en el tacho de basura, kilos de mas y la sensación de tener un cable electrificado entre las manos todo el tiempo. uffff

domingo, 11 de diciembre de 2011

Mutante

Soy esa cosa amorfa que existe en el medio de lo que fui y lo que quiero llegar a ser.

Vc

No quiero a alguien musculoso, con cara perfecta, piel perfecta. Ropa de marca, que vaya a trabajar con zapatos caros y camisa tommy. No quiero a un millonario, un departamento en puerto madero con pileta y gimnasio. No quiero autos 0 km, joyas o ropa. No quiero al que lo sabe todo, de libros de política, de lo que hay que decir y hacer.
Yo no soy perfecta, no tengo piel perfecta, ni auto, ni joyas. Nada que ver, más bien aros de coco, y ropa de feria. No tengo un doctorado ni grandes teorías. Miro novelas en portugués, me enojo por pavadas y discuto con los programas de televisión.
Quiero a alguien que cocine cantando. Que me mire todo el tiempo, cuando me pongo el pijama, cuando me tropiezo por la calle, cuando me cuelgo por ahí. Alguien que se pare en la cabeza y vea el mundo al revés. Que cocine pan casero, que me abrace cuando no duermo. Que me suelte cuando hace calor. Que se ría conmigo, que me ría con él. Que sea sincero y amable. Que le guste la cerveza en vasos de vidrio, y los licuados de agua del pantano de shreck.
Alguien exactamente como D.

Lo ajeno

Me quede con un pedazo tuyo. Bah, no de vos ahora, sino del vos de antes. De cuando nos conocimos y tenías veinte. Del vos vestido de jogging dirigiendo ese equipo de futbol de nenes de primaria. Corriendo con el silbato colgado, medio torpe, pisabas raro me acuerdo. Eso fue lo primero que me gusto de vos. Eso y los dientes desparejos como para darle trabajo a una junta de dentistas.
En fin, esa historia ya aburre, lo que quería decir es que tengo un pedazo del vos de antes, y vos no tenes ya nada de él. Te debo algo?.

Me pregunto

cuál será la correlación entre hacer un doctorado en matemáticas y usar riñonera.
Porqué la pasta de dientes sale siempre con rayitas bien formadas y prolijas, mismo si uno la amasa o aplasta con el pie.
Cómo es el monstro que me habita? Por donde entró? Ocupa espacio? Tiene peso? Se irá alguna vez?

Lo real

Ella cree que tiene un alma perdida en algún lugar del cuerpo. “Quiero lo que escondes en tu vientre” le dice él. Y cree que habla de vida, de miedos, de eso que aprieta cuando llega el amor. Pero habla de la riñonera con la plata que sobró del viaje. El mundo es un lugar cruel.

Volver

Pienso en llegar a mi pueblo, abrir la tranquera, pisar el pasto. El cielo rosa, olor a mojado a verde, a principios de verano. En la casa mis dos gatos juegan mientras yo pongo la pava y espero a que se despierten los demás. 
Mi corazón no está hecho para vivir en la ciudad.